Sobre La maldición de los Whateley's (Cinosargo 2011) en Letrasértica III- Perú







“La maldición de los Whateley's y otros
relatos” (Ediciones Cinosargo, Arica 2011) / Pablo Espinoza Bardi

Para aquellos que aún no han hecho contacto con la afilada prosa de este autor chileno, el título puede darles cierta idea del  tenor  de  este  libro;  para  los  que  estamos  un  poco habituados,  no  es  más  que  la  confirmación  del  firme derrotero  por  el  que  transita  Pablo  Espinoza  Bardi, consolidando  un  estilo  reconocido  por  unanimidad  entre sus lectores; siendo un autor talentoso y prolífico –lo cual es poco común en estos lares- que en poco menos de dos años ya ha publicado tres libros, los que conforman una suerte de  trilogía maldita: Necrospectiva I, Cuentos de Gore, de locura y de muerte  (Necrospectiva  II) y esta colección de  relatos situados –según sus propias palabras- dentro del mundo de los Mitos  de  Cthulhu.  Antes  de  entrar  en  la materia,  es forzoso  relievar  la  enorme  labor  que  realiza  la  Editorial Cinosargo,  aventurarse  con  un  autor  hasta  poco  atrás desconocido y que aborda un género casi insólito en nuestro medio, es digno de encomio. Este libro, a diferencia de los anteriores,  sí  puede  catalogarse  como  un  cuentario  en  el sentido que provee  la ortodoxia, digamos que  es un  libro orgánico. Son ocho cuentos de terror psicológico en la línea de Lovecraft y salpicados con escenas de vuelo visual que son evidencia,  sin  duda,  de  su  devoción  por  el  cine  gore;  la  influencia de Lovecraft es notoria, tanto en la construcción de las historias, en la creación de situaciones paranormales, las referencias constantes a documentos, libros malditos y personajes  provenientes  de  un  mundo  alterno,  onírico,  donde  la  mente  humana  es  la  víctima.  Ejemplo  paradigmático del  influjo  lovecraftiano es el relato que da título  al  libro,  la muestra más  lograda  que  haya  trazado Bardi,  en  opinión  de  parte,  claro  está.  La  'culpa  atávica', tema recurrente en la obra de Lovecraft, se hace patente en este  notable  cuento.  La  maldición  que  recae  sobre  el  heredero  de  la  familia  Whateley,  el  infausto  Benjamín Whateley,  es  narrada  por  su  amigo  Alexander  Phillips, testigo del deterioro mental de Benjamín provocado por la  diabólica influencia de sus antepasados, especialmente por el    brujo  Ephraim Watheley.  Para  narrar  los  sucesos,  el testigo se vale de testimonios y documentos como las cartas que  halla  en  poder  de  Benjamín,  así  va  armando  un rompecabezas  hasta  dar  con  el  origen  macabro  de  los Watheley, pero no puede evitar la espantosa muerte de su  desdichado  amigo  y,  peor  aún,  escapar  de  la  influencia maléfica que lo ha convertido en un estropajo humano. Este relato podría servir como guión para una película de terror con mucha dosis de suspenso, el resultado sería magnífico, ya  antes  hemos  dicho  que  el  lenguaje  de Bardi  se  acerca siempre  a  lo  cinematográfico.  De  “La  maldición  de  los Watheley's y otro relatos” puede decirse que es un tributo a H. P. Lovecraft, escritor estadounidense, maestro que supo ensamblar  con  acierto  el  género  de  terror  con  la  ciencia ficción, y nos conformaríamos con saberlo así, pero hay algo más de Bardi que tiende a huir del influjo de “Los mitos de Cthulhu”,  quizás  ese  “algo”  lo  hallemos  en  Necro  I  y  II, interesante pista para dilucidar la cuestión. Queda en manos del  lector  averiguarlo.  Sabido  es  que  la  obra  del  escritor estadounidense motivó entre sus coetáneos –con énfasis en el mundo anglosajón- la formación del Círculo Lovecraft, lo que  no  sospechaba  quizás  el  propio  Lovecraft  es  que  le surgiera un epígono en el desierto de Atacama y en pleno siglo XXI,  lo cual demuestra su enorme vigencia; esto sin mengua  de  las  cualidades  ya  evidenciadas  por  Pablo Espinoza  Bardi:  gran  dominio  del  relato  y  altas  dosis  de imaginación.  Elogios  merecidos  para  este  vigoroso sucedáneo del célebre “recluso de Providence”. Nota aparte:  el dibujo de la cubierta le añade un halo de misterio acorde a
lo que uno espera del libro. Excelente. (WKL)



You May Also Like

0 comentarios